domingo, 29 de julio de 2012

Forever. 4.

Ya estoy en el hospital, y estoy empezando a instalarme aquí. Es curioso, lo digo como si me fuera a quedar aquí más tiempo del previsto. Espero que no. Ya he terminado de organizar todo. Comparto la habitación con una niña pequeña. Debe llevar aqui unos meses. Pero hee oido que en unos días se va. Me alegro mucho por ella. Llevamos aquí un buen rato, contando todo el tiempo que hemos tenido que esperar. Llaman a la puerta. Entra... ¡anda! Pero si es Dani. Nos conocemos de peques, me suelo llevar bien con él. Además, tiene muchos gustos parecidos a los míos. Tiene el pelo castaño, ni alto ni bajo, y ni gordo ni delgado. Tiene gafas, cosa que no me importa, y unos preciosos ojos verdes. Le encanta leer y la música. Su color favorito es el morado. Es amable. Y siempre sonríe, pase lo que pase. Vamos, yo diría que es optimista a más no poder. El caso es que ha venido a verme. La verdad es que me hace ilusión, siempre le he considerado un gran amigo.
-Holi-me dice con una sonrisa, como es normal en él.
-Hola. ¿Qué haces por aquí?-la verdad es que llevaba un tiempo sin verle, y no se como se habrá enterado de que estoy aquí.
-Pues un pajarito me dijo que estabas aquí.
-¿Y ese pajarito tiene nombre?-porsupuesto que lo tiene e intuyo cómo se llama.
-Si... pero para ti no ¿eh?
-Venga... si seguro que te mueres por decírmelo.
-Vale, y si, la verdad que sí. Fue tu madre-me giro hacia mi madre.
-Pensé que te gustaría ya que hace tiempo que no le ves-ciertamente, llevaba razón.
-Vale, y... ¿cómo vas a volver?
-Mi madre vine a por mí. Mañana volveré antes de que te operen, y me quedaré hasta que salgas, luego ya me tengo que ir.
-Ah... vale...
-Bueno, adiós, voy a cenar abajo, y a esperar a mi madre. Que duermas bien, besis.
-Adius.
Me acaban de traer la cena. Sopa, y una barrita pequeña de pan. ¿Se podían esforzar un poco más no? No creo que les cueste mucho. Y encima el olor no es precisamente muy atractivo. Se me revuelve el estómago. Creo que no me lo voy a comer. -Sara, ya sé que estás pensando en no comértelo, pero mañana no vas ni a desayunar, ni comer, ni merendar, y probablemente tampoco cenar, excepto el suero, por vena. Así que aunque no te guste, yo que tú me lo comería. -Pero...¡huele mal! -Ya, pero yo diría que a ti te gusta comer, así que si no quieres pasar hambre mañana, ya te lo estás comiendo. -Vale...-no me hace ninguna gracia no poder comer mañana, así que me tendré que comer esto. Me lo como como puedo, no es muy agradable, aunque el pan está calentito y eso me lo como con gusto. La sopa... bueno, eso es un caso aparte. La niña con la que comparto habitación está viendo Bob Esponja. Luego viene iCarly, siempre me ha parecido guapo Nathan Kress(Freddie). Lo dejo, que me desvío y me pongo a hablar de quién está bueno y quién no. Jajajaja. Ah, y nunca me ha gustado Miranda... bah, eso da igual. Pero no me meto con nadie ¿eh? Termino mi cena, bueno, si es que eso se podía considerar cena. Me pongo el pijama ee intento dormir. No puedo. Aparte de que estoy acostumbrada a dormirme con música, hay demasiadas preguntas rondando mi cabeza. ¿Por qué mi madre ha llamado a Dani? ¿Cómo es que Dani ha querido venir, y encima venir mañana también? Para esas no creo que obtenga respuesta, no creo que se lo sonsaque ni a mi madre ni a Dani. Me tendré que aguantar. ¿Qué es lo que me quería decir Cameron? Eso espero averiguarlo pronto. ¿Y si la operación sale mal? La verdad es que eso es lo que más me preocupa, y mi voz, si algo sale mal, ¿que pasará con ella? ¿Qué pasará cuando tenga una cicatriz en el cuello? Ya sé que hay formas de disumularla con cremas y cosas así, pero siempre se notará. Me gustaría ser de esas personas a las que no les importa lo que piensen o digan de ellas, pero me temo que no lo soy. Voy a intentar dormir. Pensaré en otra cosa. Pensaré en... ¡no lo sé! Todo me trae alguna preocupafión o algún recuerdo malo. Necesito algo... mmm... neutro. Que no sea ni bueno, ni malo. Que no me traiga ni buenos, ni malos recuerdos. ¡Qué estoy diciendo! Necesito algo que solucine todos los problemas. Algo que me ahorre pasar malos raros. ¿Sabéis esos momentos, en los que te sientes impotente? ¿En los qque quieres hacer algo y no puedes? ¿En llos que quieres hacer muchas cosas y te estresas y no haces ninguna? ¿O al revés? Pues sé que eso me va a pasar mañana. Y eso es lo que me pasa ahora. Demasiadas cosas en las que pensar. Y no es que pueda hacer poco. Es que en el estado en el que estoy no puedo hacer exactamente nada. Y los días y semanas siguientes tampoco podré hacer nada. Y sinceramente, eso me viene muy bien, así podré relajarme un poco. Aunque no sé hasta que punto eso es bueno, porque me voy a poner de los nervios por no poder hacer nada. Mira, lo dejo, voy a dormir aunque piense en todas esas cosas y preguntas. Mañana necesito estar descansada. Buenas noches.

No hay comentarios:

Publicar un comentario